Terranova hace preguntas cuando escribe. Me gusta que se pregunte, un hipercrítico debe preguntarse:"¿Las editoriales tienen influencia en la opinión sobre los libros? ¿Es el mercado de la reseña literaria ámbito del crimen, o más bien una zona irrelevante de los medios ?" También resuelve conflictos personales en otras columnas e intenta hacer justicia por su generación 00 (¿Generación de qué? ¿Mi generación? ¿Nuestra generación?). Son detalles. Está bien elegido el hombre, lástima sus contricantes, en alguna ocasión faltos de cierta formación intelectual. "Agarratela con alguien de tu edad, Terranova"·, se dice en el barrio. Me gustaría que se meta con el periodismo hecho y derecho. Toma los suplementos, está bien, pero los críticos de libros... ¿quiénes son los críticos de libros? ¿Tienen predilección por alguna editorial? ¿Hacen amiguismo cuando reseñan? ¿Quiénes lo hacen? Nombres, por favor. Si son mentirosos, que se sepan. Crítica a una crítica, por ejemplo, ¿no estaría bueno?. Una contracrítica. O una contrahipercrítica. ¿Cuál sería la pregunta, Terranova?
Ahora me doy cuenta que no escribí de Cicco. De Cicco sólo vamos a decir que como asesino serial deja demasiadas huellas. Lo encontrarían al segundo asesinato. O en el primero. No me interesa que critique a Pepe Eliaschev por sus cenas de fin de año ni por su flequillo. Tampoco me interesa que mezcle a Diego Fucks con Nino Dolce, personajes notoriamente diferentes. Ni siquiera que simplique a un personaje como Chiche Gelblung, que tiene lados más cuestionables que las curiosidades que frecuenta su mente. Parece, Cicco, una síntesis del posmodernismo, sin ideologías ni nada que se le parezca. Hagamos reir y nada más. Lo de Nik estuvo bien, es cierto. Igual, a Cicco lo prefiero como actor porno.
Algunas preguntas finales sobre Hipercrítico. ¿Por qué Julián Gallo dejó de escribir y la sección Medios está casi desierta? Hubiera sido buena una aclaración. ¿Por qué se dejó el blog de discusión? Había empezado bien aunque de algún modo el "Abierto al público" lo sucedió. ¿Cómo se llegó a cometer el error de inaugurar una sección llamada "Cinco preguntas incómodas" para luego titularla "¿Me permite una pregunta?" que sería todo lo contrario a incomodar? Que un periodista tenga que preguntar primero "¿Me permite una pregunta?" me sabe a sumiso más que a hipercrítico.
Hipercrítico es una buena intención, con integrantes interesantes pero a los que se les nota limitaciones a la hora de dar nombres, de ejemplificar, de ser claros en la crítica. Aún con estos defectos, se trata de un espacio interesante y sin muchos antecedentes para revisar los recovecos de la prensa.
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